La exploración espacial ha registrado avances impresionantes desde que la primera nave espacial superó la atmósfera de nuestro planeta. La NASA, con ayuda de otras agencias espaciales gubernamentales y comerciales, han enviado múltiples dispositivos hacia las profundidades de nuestro sistema solar.
Tal es el caso de Marte, que actualmente tiene naves terrícolas explorando de forma activa la superficie del Planeta Rojo. Curiosity, Ingenuity y Perseverance constantemente recorren a nuestro vecino y envían información sobre lo que ocurre en aquel árido territorio.
Es así como frecuentemente tenemos dos tipos de imágenes de Marte. En primer lugar están las fotografías que se capturan con los equipos con lente óptico, presentes en cada uno de los dispositivos mencionados.
Estas fotos tardan más en llegar por dos razones: uno que dependiendo de la calidad, la transmisión de imágenes hace que sea lenta por lo pesado del archivo y dos porque también se podría enviar como un documento comprimido.
La otra forma en la que se pueden obtener datos de Marte es por medio de las herramientas de registro infrarrojo, con la que se pueden realizar ilustraciones exactas de lo que es el planeta rojo.
La carita sonriente de Marte
La carita sonriente de Marte se captó con los equipos fotográficos. No tiene una profunda implicación científica. Solo destaca por ser una referencia a algo muy común de la Tierra, pero que ocurre a miles de millones de kilómetros de distancia.
Smiley Face Crater on Mars.
– NASA pic.twitter.com/xsJiCOtIlS
— Curiosity (@Sciencenature14) July 24, 2022
Un planeta “azul”
Recientemente, la agencia espacial estadounidense compartió una imagen alterada del segundo planeta más pequeño del Sistema Solar, en un torno verde azulado brillante.
La publicación de la imagen se realizó para explicar un particular fenómeno climático cerca del cráter Gamboa de Marte, que consiste en una variación del viento en la parte superior de las dunas.
Las formaciones más grandes en color más intenso y que son más o menos paralelas se denominan cordilleras eólicas transversales, cubiertas de arena muy gruesa.
La NASA detalla a las dunas como oscuras y esculpidas por el viento en largas líneas, que cubren un área tan grande como el estado de Texas.
La impresionante composición realizada por Yvette Smith, que cubre un área de 19 millas (30 kilómetros) de ancho, puede mostrar diferentes tonalidades y tienen el propósito de ayudar a entender de qué manera soplaba el viento cuando se crearon estas cordilleras.